viernes, 24 de diciembre de 2010

"Balada triste de trompeta" Vaya tela, vaya tela.

Tras ver la proyección de "Balada triste de trompeta" he salido del cine con una sensación de esas que te quedas contento y de esas veces que piensas que el cine aún puede seguir siendo cine y que aún quedan directores como éste que puede hacerte revolver sobre tu butaca. Es de esas veces que el precio de la entrada queda completamente justificado e incluso de esas veces de las que quizás necesite un segundo visionado, para volver a disfrutarla. Me ha parecido una gran película, en todos sus sentidos: técnico, artístico, en su historia y en su total. Podría decirse que he disfrutado como un niño en un circo, con esos payasos que por fuera pueden ser lo más graciosos del mundo, y por dentro pueden llegar a ser unos auténticos hijos de puta. Y también comprendo al público que no ha disfrutado de esta cinta, porque es la más personal de Álex de la Iglesia, y cuando un director como éste hace su cinta más personal, no va a ser del gusto de todos. No es Steven Spielberg, porque si hablamos de Tim Burton o Quentin Tarantino la cosa cambia en realización personal. Y ojo, aquí hay que saber a lo que se va. Junto con "El día de la bestia" y "La comunidad" me ha parecido su mejor película hasta la fecha, y uno de los mejores films español de los últimos años.



Balada triste de trompeta tiene un ritmo implacable en sus 107 minutos de duración. De la Iglesia no te deja respirar en ni un sólo segundo de la cinta, y el drama, la violencia, el humor negro, la acción y el amor que se dan se te pasa volando. La película comienza retratando el reclutamiento de unos payasos por parte de un grupo de rojos durante un espectáculo de circo. La escena-prólogo retrata a la perfección (en cinco minutos) lo que fueron años y años de guerra civil española y masacre, todo parte de nuestro pasado. El pasado que parece que algunos han olvidado, y que forman parte de nuestra Historia. Narrando parte de ésta comienzan los magistrales títulos de crédito, con esa potente banda sonora original compuesta por Roque Baños (a más de uno le sonará a Semana Santa). A continuación se nos presentará al protagonista Javier (Carlos Areces) en el mejor papel que ha interpretado hasta ahora. En la cinta veremos poco a poco su transformación, debido a su pasado en la dura infancia de la guerra civil, y a que el amor le juega una mala pasada que termina por colmar el vaso de su locura. La apariencia como payaso esconde al monstruo que liberará de un momento a otro, el mosntruo que según que momento de la vida decida golpearte, decidirá por ti en una acción que te puede llevar a la más absoluta locura. Areces borda el papel, con la apariencia perfecta y con las frases justas, y sería el amo de la función si no es por la presencia del colosal Antonio de la Torre.



Antonio de la Torre (Azuloscurocasinegro, Gordos) realiza el mejor papel de su carrera en esta película. Está sencillamente inmenso, colosal, grandioso, temeroso, macabro, violento y es un auténtico cabrón. Nada más verle tienes la sensación de que el tío tiene mala leche, de cojones. Y si no le ríes las gracias, la llevas clara. El personaje de Sergio está perfectamente cuidado por de la Iglesia y su guión. Está mimado hasta los límites, porque es el motor de la cinta. Su presencia impone, y es un grandísimo actor que además hace trabajar bien al resto de compañeros. Maltratador, vicioso, bebedor, sin embargo adora a los niños, y es su vida. Sin ellos no es nada, así de claro. Trata a su novia Natalia (correcta Carolina Bang) como un títere, cuando quiere, la mangonea y manipula a su antojo. Es perverso y malvado, escondido tras un maquillaje de payaso tonto que en sus horas laborales hacer reír, para luego en su vida privada hacer todo lo contrario. Es payaso porque si no sería un asesino. Memorable la escena del chiste, y lo que desencadena éste, memorable. La transformación de Sergio sólo es física, porque la moral está descrita de malvada desde primera hora. Ese cambio en su aspecto sirve para dar a la bestia interior su verdadero aspecto, el que se merece (magnífico Reyes Abades en efectos especiales). Sergio y Javier entrarán en una disputa mortal por Natalia, describiendo así de la Iglesia lo que en realidad es este país, dos payasos matándose a muerte. Demuestra que los españoles somos así, tenemos nuestro pasado oscuro como todos, pero nos dice que realmente no tenemos buen miramiento por nuestro vecino o amigo, al revés. Le odiamos, tal vez porque simplemente le vaya bien. Le criticamos, le hacemos la vida imposible, simplemente no lo podemos evitar porque somos así de payasos.



El atentado de Carrilo Blanco, el puntazo a los etarras por parte de Javier/payaso triste, el homenaje a Raphael, las influencias del Joker o It, el humor característico del realizador español, cierta escena de acción al más puro estilo Tarantino y por supuesto la escena vertiginosa marca de la casa van incluidas todas en la película. Álex se arriesga, y mucho. Se arriesga y sale victorioso, y ya no es joven para eso. LLeva muchos años en este oficio y ha demostrado aquí seguir teniendo ambición como el que más. El arriesgarte tanto puede tener sus defectos, como todo. Y es que te tilden de exagerado, gore, macabro o que se te haya ido la pinza entre otros términos. Pero muestras algo nuevo que no se haya visto antes, y desde luego el cine español no ha visto nada parecido a ésto. La fotografía de Kiko de la Rica es merecedora de premios, ya que la ambientación roza la perfección y la escenografía es excelente. Los demás actores que acompañan al trío protagonista como Santiago Segura, Enrique Villén, Manuel Tallafé, Sancho Gracia, Fernando Guillén Cuervo, Raúl Arévalo o Fran Perea están todos perfectos en sus roles. Mención especial para el estupendo cameo como siempre de Terele Pávez, en una de las mejores escenas de la cinta.



Por supuesto Balada triste de trompeta no es un film perfecto y tiene sus defectos, aunque mínimos bajo mi punto de vista. La trama o hilo argumental no es todo lo consistente que debiera ser, pero esto lo gana en la fuerza de los actores completamente entregados a sus personajes. Como también posee esa fuerza casi cada plano que su director introduce en la cinta, dejándote unas cuantas imágenes inolvidables, auténticas perlas que esperemos que perduren en el recuerdo del cine español. Álex de la Iglesia ha sido muy valiente y ha visto su mérito reconicido justamente en La Mostra, no así en la taquilla de nuestro propio país, que luego los Mario Casas o los Torrentes llenan los cines. En fin, esa es otra historia. No sé si a mí se me habrá ido la pinza como al director, pero está claro que me ha parecido una gran película, de las mejores del cine español de los últimos años. Se nota que las últimas críticas en sus últimos films le hicieron daño al actual presidente de la Academia. Ahora eso sí, la película tiene tela.

Mi nota: 7,9

3 comentarios:

  1. A mi la verdad como ya dije no termino de gustarme del todo, como bien dices la ambientación la fotografía y para mi sobre todo los actores principales Antonio de la Torre y Carlos Areces(a Carlonina Bang no término tampoco de creermela)están espectaculares ,otra cosa es por ejemplo Santiago Segura y Fran Perea que salen poco pero lo suficiente para dejarme un mal sabor de boca, pero la película yo creo que llega un punto en el que los acontecimientos empiezan a aparecer mas que por ser parte de la historia por que el director parece querer meter esas situaciones que se le han ocurrido con calzador, no se es como si te compras un pantalón y hasta las rodillas son muy bonitos pero desde la rodilla hasta los bajos esta lleno de parches de colores, eso si hay que reconocer la fuerza y la potencia que tiene cada una de esas escenas la verdad es que la película tiene muy buen ritmo y no te deja un solo respiro y sobre todo aparte del principio que todo el mundo lo resalta yo mencionaría también la escena final y tambien me quedo con una frase que dice Javier sobre el valle de los caídos dice algo como ya ves tantos años matándose entre ellos y al final han acabado todos juntos en el mismo sitio....yo le doy un 6,5

    Por cierto felices fiestas a todos los colegas de comentarios que ya somos casi como una family

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  2. Por el título de la crítica (vaya tela) pensé que no te había gustado. En esencia estoy contigo en casi todo lo que dices, pero si bien el personaje de Areces tenía que explotar en algún momento (por su caracter reprimido y porque su padre le dice que hay que vengarse), me pareció bastante precipitado todo y, se me desdibujó el personaje mucho. De alguna manera, se pierde toda la empatía que se hubiera generado préviamente con este personaje (mira que no me molesta en absoluto la sangre en las películas, pero la escena en que se come un ciervo me pareció fuera de lugar) Eso sí, De la Torre está colosal, como bien dices.
    Bueno esa es mi opinión y su director me sigue encantando y aplaudiré a rabiar los premios venideros. De verdad los títulos iniciales son los mejores que he visto NUNCA.

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  3. He estado un poco liado estos días, pero os contesto ahora. Os entiendo a los dos, esta es una película que te produce únicamente dos sensaciones: o te gusta o no. Ya está, es una cinta que juega mucho con los gustos de cada uno. Y a mi lo macabro del asunto, esa "ida de pinza" me ha encantado y veo que sin eso el film no hubiera funcionado. Porque quizás se hubiera quedado a medias ¿cómo se supone que tiene que funcionar este tipo de films donde dos payasos se pelean a muerte? Para mí, como ya comento en la crítica, De la Iglesia le da ese tono de locura perfecto a Javier y esa mala leche incontrolable inconmensurable a Sergio. Esa es mi pregunta, si quieres hacer una película así, ¿que otra forma hay de hacerla sin que luego te acusen de haberte quedado a medio camino como a ese 99% de los que lo intentan? Varias escenas de esta cinta se quedan en la retina, y son unas cuantas, cosa que no consigue todo el mundo.

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